viernes, 31 de diciembre de 2004

Para este 2005



Que el camino salga a tu encuentro.
Que el viento te sople siempre de espaldas.
Que el sol brille calido sobre tu rostro,
que la lluvia descienda mansa sobre tus campos,
y hasta que volvamos a encontrarnos . . .
Que Dios te sostenga suavemente en la palma de su mano . . .

Dios los bendiga . . .